Comandante de un Submarino Sueco - Liderar a cientos de metros de profundidad

La guerra híbrida actual implica atacar las vulnerabilidades críticas . Y puede que sean las Fuerzas Armadas las que constituyan esa vulnerabilidad.

En la actualidad, Fredrik Lindén se dedica principalmente al análisis y la estrategia, pero echa de menos la vida en un submarino. Casi todos los días. FOTO: JOHAN BERGMARK. 

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• EL DIRECTOR DE LA REVISTA. 
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• Cuando se tiene el papel de líder a unos cientos de metros bajo la superficie del mar, no hay lugar para la incertidumbre. Conocemos a Fredrik Lindén, jefe de la Flotilla Sueca de Outriggers.

El enemigo siempre busca algún tipo de sorpresa, un ataque rápido e inesperado. Querrán hacerse con el control del Mar Báltico para crear una posición operacionalmente ventajosa e impedir que nos movamos en el mar. El 80-90% de todas nuestras importaciones vienen en forma de quillas, así que es una forma efectiva de paralizar nuestro país...  

El escenario no es imposible, según Fredrik Lindén, Comandante de la flotilla de submarinos sueca. ¿Y no quiere responder sí o no a la pregunta de si Suecia podría realmente ir a la guerra? 

- Eso es demasiado categórico. Digo como los politólogos: "Depende". Ahora vivimos en un mundo mucho más incierto que antes, y sería un error no prepararnos.  

Con un uniforme de trabajo de mangas cortas y piernas largas, nos muestra la parte superior del submarino HMS Uppland, que hoy se encuentra temporalmente flotando junto al Skeppsbron en Estocolmo. Parece una ballena negra en el primer resplandor de la luz del sol durante semanas, con sólo su espalda y su torreta como aleta por encima de la superficie del agua. Sorprendentemente duro, dado que unas 30 personas parecen estar ahí abajo.  

 HMS Uppland

¿Cuál es su objetivo? En primer lugar, actúa como elemento disuasorio, dice Fredrik Lindén. Los cuatro submarinos suecos elevan el umbral de ese escenario de ataque que acaba de dibujar. Operan bajo la superficie, ocultos y con capacidades secretas. Si ocurre un desastre, tienen la capacidad de hundir el barco del adversario. Es algo para lo que se entrena durante todo el año.  

En una situación así, el liderazgo de Fredrik Lindén tendría un papel crucial para el futuro de todos.  

- En ese caso, da confianza el hecho de que haya hecho lo mismo en el pasado con el personal al que luego doy órdenes: saben que no les enviaría a misiones imposibles ni a correr riesgos innecesarios", dice.

Abandonamos el HMS UPPLAND y entramos en el barco de rescate de submarinos que está al lado, el HMS Belos. En la pared de la sala de Fredrik Lindén cuelgan escudos de armas, un retrato obligatorio de los Reyes y, como si la húmeda y ondulante realidad marina no fuera suficiente: fotos enmarcadas de barcos.     

- Se vuelve tan ridículamente filosófico cuando se habla del amor al mar. Pero se trata del equilibrio entre dominarlo y respetarlo, y descubrir lo que hay al otro lado del horizonte. También hay un encanto en la propia embarcación, en ser un marinero. Aunque estos días sólo llegue a navegar por los escritorios.     

Las "mesas de trabajo" implican tareas estratégicas y analíticas. El trabajo de Fredrik Lindén consiste en examinar cómo cambia la naturaleza de los conflictos internacionales a lo largo del tiempo, para asegurarse de que el brazo submarino se mantiene al día. Esto implica tanto el desarrollo de mejores tecnologías y buques como la formación de futuras tripulaciones. 

- Es un trabajo variado y estimulante, pero echo de menos la vida en un submarino. Todos los días. 

Es de Malmö. Su padre había trabajado en el mar, y Fredrik Lindén creció con historias de allí. Como quería contribuir él mismo a las cenas de los domingos, se aseguró de hacer el servicio militar en la marina. Fue llamado como operador de sonar en un submarino, es decir, la persona que actúa como los ojos y los oídos del barco.  

En un principio no había planeado una carrera militar, pero los planes de veterinario de su adolescencia ("pensaba que tenía más en común con los animales que con las personas, tal vez porque soy hijo único") se dejaron de lado durante su servicio militar. Eso es porque estaba en el mar y se perdió la oportunidad de aplicar a la universidad.     

- Tal vez fue mejor así. Probablemente había pasado demasiado tiempo navegando y demasiado poco tiempo en la escuela para entrar en el programa de veterinaria.  

Y lo que es más importante, se había dado cuenta de que le gustaba la vida en un submarino. No menos importante es la camaradería. Estar alrededor de 30 personas en un espacio subacuático reducido, sin luz diurna ni aire fresco, durante semanas, a veces hasta un mes, crea vínculos inusuales, dice.    

- Se llega a conocer rápidamente y en profundidad. Es una situación vulnerable, tienes que confiar mucho en tus colegas. Crea un vínculo que a veces se extiende más allá de las fronteras del país. La comunidad de submarinos de todo el mundo es una hermandad colegiada. 

Tampoco tenía nada en contra de la cultura de vanguardia.    

- La marina era más ruda en ese entonces. Era un liderazgo diferente. No quiero llamarlo penalista, pero fue más duro que hoy. Me llamó la atención que hubiera un poco de dificultad.     

Así que se quedó, y pasaron los años. Pelaba patatas y fregaba retretes y 15 años después era capitán de barco.  

Así lo describe brevemente. De hecho, fue progresando en el escalafón, hasta que adquirió una sólida experiencia y conocimientos y, de repente, era el que mandaba... y, por tanto, ya no formaba parte del resto de la banda.   

En el ejército, supongo, los gerentes nunca son del todo parte de la pandilla, dice, pero para los comandantes de submarinos eso es especialmente cierto. 

- Eres de facto el último puesto de avanzada. Independientemente de lo que ocurra en el submarino, pasa mucho tiempo antes de que nos decidamos a contactar con la costa, porque cuando subimos a la superficie y transmitimos, solemos decir que nuestra posición está despejada. Y cualquier incertidumbre que pueda surgir se lleva a la cabina.     

Se refiere a una película, U-571, sobre la caza de un submarino crítico durante la Segunda Guerra Mundial. En una situación de estrés, el capitán del barco se encuentra inseguro. Entonces el contramaestre le pone en su sitio: como comandante de un submarino, nunca debes decir que no sabes. 

  

- Creo que esa escena dice mucho de lo que es ser un comandante de submarino. La camarote del comandante es el lugar más solitario del mundo.     

  "El camarote del comandante es el lugar más solitario del mundo".    

Entonces, ¿cómo piensa en su propio liderazgo? ¿Ha gestionado ese estilo duro que él mismo conoció y le gustó en su día?  

- No. Una cosa es ser joven y no saber nada más. El lugar de donde vengo en Malmö tampoco era de bosques dorados y verdes, y cuando encuentras un entorno similar al que has crecido, te sientes como en casa. Pero voy a decir esto, y no lo digo para ser "mandón": estoy muy contento con el camino que hemos hecho en las Fuerzas Armadas en los treinta años que llevo aquí. Hoy es un lugar de trabajo mucho más agradable, más sabio y más inclusivo.    

Sí, al igual que en la sociedad en general, la filosofía de liderazgo en las fuerzas armadas ha cambiado con el tiempo. Al mismo tiempo, dice Fredrik Lindén, no se puede obviar que se necesita una autoridad clara en un sector en el que se es potencialmente responsable de la vida y la muerte de otras personas. 

Sin embargo, es importante equilibrar los momentos de seriedad, en los que se exige "pura obediencia", con una cultura más abierta de libertad para ser creativo y asumir responsabilidades.  

 - Esto requiere un comportamiento un poco "camaleónico". Si estás a punto de entrar en un ejercicio serio o en un elemento que implique riesgo, tienes que flexionar tus músculos y hacer que la tripulación se suba al carro, para que puedan saber por tu tono y tu forma de moverte que se trata de un asunto serio. En otra situación, podría tener un tono más suave. 

Al mismo tiempo, él mismo no debe perder nunca la concentración. Dice que no lo ha hecho en una ocasión. Ha acabado en una situación innecesariamente arriesgada, porque sus pensamientos han estado en otra parte. Sin embargo, cuando realmente ha importado, ha funcionado bien. 

LAS SITUACIONES  MÁS PELIGROSAS EN UN SUBMARINO: Son el fuego y la intrusión de agua. Fredrik Lindén ha experimentado ambas cosas, pero no puede entrar en detalles por razones de confidencialidad.  

- En un caso, se requería pura obediencia para resolver el problema. En el otro caso, se trató más bien de una reacción de respaldo a la experiencia, que minimizó el daño. 

Dejamos el camarote y salimos a cubierta. El verde Lund brilla a lo lejos. Algún barco turístico pasa sin rumbo fijo. Una guerra parece difícil de imaginar.

Aun cuando en ocasiones se han enviado señales amenazantes a Suecia desde naciones como Rusia y China, poca gente puede imaginar un ataque militar. ¿Acaso los conflictos en nuestra parte del mundo no tienen que ver con los ataques informáticos, la desinformación y otras cosas a un nivel convenientemente abstracto? 

- La guerra híbrida actual implica atacar las vulnerabilidades críticas de las naciones. Y puede que sean las Fuerzas Armadas las que constituyan la vulnerabilidad crítica. En ese caso, podría elegirse la fuerza armada como método", dice Fredrik Lindén.

Aun así, la paz ha prevalecido durante más de 200 años, así que ¿qué significa dedicar una vida profesional a prepararse para una situación que quizá nunca llegue?  

¿Te refieres a un equipo de fútbol que sólo practica y nunca llega a jugar un partido? 

Ese es uno de los puntos de lo que hace, dice: que la guerra no llegue. 

De hecho, la paz es todo el "punto de entrada" para él, dice.

- Cuanto mejor sea lo que hago, más alto será el umbral del conflicto armado. 

DATOS: FREDRIK LINDÉN 

Comandante y Jefe de la Primera Flotilla de Submarinos.
Nació en 1972.
Está casado con Annika y juntos tenemos dos hijas, Tove y Siri.
Vive en Karlskrona. 
En mi tiempo libre: "Cuando no estoy nadando, hago carpintería y navego. Tuvo la gran suerte de formar parte de la victoria en el Campeonato de Europa 2019 en la clase Vintage 12mR en el barco VIM de 1939. La misma tripulación también ganó el Campeonato Mundial en Helsinki este año".

Referencias:

Andersson, T. (2021, November 8). Han är sista utposten - hundratals meter under havsytan. Hem. Retrieved November 21, 2021, from https://chefstidningen.se/reportage/han-ar-sista-utposten-hundratals-meter-under-havsytan. 

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