Singapur: Entrenamiento de escape submarino

la Armada de Singapur entrena a sus submarinistas en técnicas de supervivencia y escape, para prepararlos para una emergencia.

Silenciosos y sigilosos, los submarinos son uno de los cazadores más mortíferos de la Armada. Pero en el mar puede ocurrir cualquier cosa y, a pesar de los esfuerzos de la tripulación, un submarino puede verse en apuros y ser incapaz de salir a la superficie.

Para prepararse, los submarinistas de la Armada de la República de Singapur (RSN) realizan periódicamente ejercicios de escape como parte de su formación.

Los instructores de la STS (izquierda) se aseguran de que los alumnos sepan subir a su balsa salvavidas, que forma parte del equipo personal de supervivencia de un submarinista.

Los submarinistas también reciben formación en instalaciones de escape en el extranjero, en países como Alemania.

A nivel local, la Escuela de Entrenamiento de Submarinos (STS) de la 7ª Flotilla también imparte entrenamiento de escape submarino. Forma parte de un curso de cualificación de nueve meses de duración para pasar el corte como submarinista, y al que también asiste la tripulación cualificada para mantenerse al día en sus ejercicios.

Un instructor de la Unidad Naval de Buceo (en primer plano, a la izquierda) vigila a un alumno durante la práctica de regulador de oxígeno.

Prácticas con reguladores de oxígeno

Para poder operar bajo el agua, todos los submarinistas en prácticas deben sentirse cómodos respirando a través de un sistema regulador de oxígeno.

En este ejercicio, los alumnos practican la localización de los reguladores y la respiración a través de ellos mientras se acercan a la «escotilla de escape».

Los alumnos se ponen una «venda en los ojos» para mejorar su capacidad de utilizar el regulador sin ver.

El ejercicio se repite con una «venda en los ojos» para simular condiciones en las que la visibilidad es baja.

Esto puede ocurrir si el submarino se inunda o si hay humo en sus camarotes.

Simulacros de supervivencia en superficie

Durante una maniobra de escape, cada miembro de la tripulación dispone de un equipo personal de inmersión de escape submarino, que incluye un traje de escape y una balsa salvavidas.

El traje naranja brillante es una prenda de cuerpo entero diseñada para el escape presurizado. Incluye un chaleco salvavidas y protección térmica.

Los alumnos practican a ponerse el traje de forma rápida y eficaz, como lo harían en la cámara de evacuación.

Un alumno se pone el traje de escape submarino.

Antes de salir del submarino, inflan los trajes con aire, lo que les permite subir rápidamente a la superficie.

los alumnos despliegan la balsa salvavidas unipersonal, que puede durar más de 24 horas en el mar a la espera de ser rescatados.

Un alumno (derecha) sube a la balsa salvavidas, la clave de la supervivencia de un submarinista en la superficie.  

Los instructores les enseñan a entrar en la balsa, una tarea difícil que requiere sincronización y coordinación, especialmente en condiciones de mar gruesa.

Los instructores también volcarán la balsa salvavidas, enseñando a los alumnos a escapar y volver a entrar en la balsa cuando sea necesario.

Cuando se entrenan en grandes simuladores de escape de submarinos en el extranjero, los alumnos pueden reproducir más fielmente las acciones que tienen que realizar para escapar de un submarino inutilizado.

Por ejemplo, en países como Alemania (así como en Australia y Suecia en el pasado), donde disponen de una torre de entrenamiento llena de agua con una «entrada subacuática» en la parte inferior para simular la esclusa de un submarino.

Submarinistas de la RSN realizando ejercicios de escape -incluido el ascenso a la torre (arriba) y ejercicios en superficie (abajo)- en una instalación de Tanques de Entrenamiento de Escape Submarino en Suecia. [Fotos cortesía de la Escuela de Entrenamiento de Submarinos].

Ejercicios en torre

También se enseña a los alumnos a realizar un ascenso libre, en caso de que surjan problemas con el traje.

Bajo la supervisión de instructores de la Unidad de Buceo Naval (NDU), se sumergen hasta 6 m bajo el agua y ascienden lentamente hasta la superficie sin utilizar el regulador de oxígeno.

Dos mujeres aprendices de submarinista realizan un ascenso libre como parte de su entrenamiento de supervivencia. 

Los instructores se aseguran de que suelten burbujas de aire constantemente, así como presión por los oídos, durante su ascenso a la superficie.

Contener la respiración sería fatal, ya que el aire de los pulmones se expande al ascender.

Al repetir los ejercicios, los alumnos perfeccionan su capacidad para controlar la exhalación y mantener la calma bajo el agua.

El entrenamiento de escape submarino es sólo un componente de lo que se necesita para llevar la insignia de submarinista (también conocida como los «Delfines»). ¿A qué más se someten los alumnos para convertirse en guerreros submarinos? Averígüelo.

Fuente

//RELATO DE THRINA THAM /FOTOS DE CHAI SIAN LIANG,  https://www.defencepioneer.sg/pioneer-articles/20nov24_news1